Limpieza de joyas en casa: lo que sí y lo que no debes hacer

Con el paso del tiempo, incluso las joyas más deslumbrantes pueden perder su brillo natural. El contacto con cremas, perfumes, polvo o simplemente el uso diario, puede opacar el oro, la plata o las piedras preciosas.

Es por eso que muchas veces nos vemos en la necesidad de intentar mil y un trucos caseros para devolverle el brillo a nuestras joyas favoritas.

Pero ¿sabías que podrías dañarlas sin darte cuenta? Pon mucha atención a cada método de limpieza, antes de aventurarte a intentar uno.

Limpieza suave con agua tibia y jabón neutro Es el método más tradicional y seguro para piezas de oro o plata sin incrustaciones delicadas. Basta con dejar la joya unos minutos en agua tibia con unas gotas de jabón neutro, cepillar suavemente con un cepillo de cerdas suaves y secar con una tela de microfibra. Ideal para un mantenimiento de joyería básico y frecuente.

Bicarbonato o vinagre El bicarbonato de sodio, mezclado con agua, ayuda a remover residuos superficiales, mientras que el vinagre blanco puede devolver brillo a la plata. Sin embargo, estos métodos deben aplicarse con precaución: el exceso de abrasión puede dañar el acabado o las piedras más blandas.

Productos especializados Hoy en día, es posible encontrar en Amazon y otras tiendas en línea una gran variedad de productos para limpiar joyas: desde líquidos químicos específicos hasta toallitas impregnadas. Estos productos suelen ofrecer resultados rápidos y son seguros cuando se siguen las instrucciones al pie de la letra

Limpiadoras ultrasónicas: tecnología al alcance del hogar Las limpiadoras ultrasónicas se han popularizado por su eficacia y facilidad de uso. Funcionan mediante vibraciones de alta frecuencia que eliminan la suciedad más profunda. Son excelentes para joyas de oro, platino o piedras duras como el diamante. Sin embargo, no todas las gemas soportan esta técnica: es mejor evitar su uso en piezas con perlas, esmeraldas o piedras porosas.

La importancia del cuidado profesional Aunque todas estas técnicas pueden devolverle algo de brillo a tus piezas, cada método conlleva riesgos si no se aplica correctamente. Un químico mal usado o una máquina ultrasónica demasiado potente pueden provocar daños irreversibles.

Por eso, siempre es recomendable llevar tus joyas con un experto en limpieza y mantenimiento de joyas, ya que también revisan engastes, pulen con precisión y restauran su belleza original sin comprometer su estructura.

Tu joya merece brillar por muchos años más. Confía su cuidado a manos expertas y solicita nuestro servicio en ÚNICAS sucursales:

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